Se trata de escapar de la apertura de procedimientos penales por captación ilegal de clientes y operaciones de blanqueo en el país vecino.
El acuerdo alcanzado con el Parqué Nacional Francés, institución responsable de la investigación de delitos económicos y financieros, incluye dos multas iníciales de 65,6 y 57,4 millones de euros y una indemnización por daños al Estado de Francia por valor de 115 millones de euros.
En su comunicado oficial, Credit Suisse afirmó que el acuerdo no supone admitir acciones delictivas.
La investigación por parte de la Justicia francesa giraba en torno a presuntos delitos fraudulentos cometidos de 2005 a 2012.
El anuncio se produce en la misma semana en que el banco de Zúrich tiene previsto presentar, este jueves 27 de octubre, su esperado plan estratégico de reestructuración, tras años de problemas financieros, escándalos y golpes a su imagen.
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