Esa entidad dijo que la operación y producción del centro continúan relativamente estable, velan por la salud y las medidas de seguridad de los obreros y solo un “número pequeño” de ellos contrajo la enfermedad.
Según acotó, tienen en vigor las políticas de prevención y además brindan el aseguramiento material y psicológico al personal de la fábrica.
Foxconn agregó que avanzan en las labores epidemiológicas, el impacto de la Covid-19 es controlable y no afectará las previsiones de producción para el último trimestre del año.
La planta de Zhengzhou es la más importante aquí en el ensamblaje de los iPhones y su nómina la compone 350 mil trabajadores.
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