La sede del cónclave será la Ciudad de México y asistirán los mandatarios de Ecuador, Perú y Colombia, que son los países miembros junto a México, pero también estarán los de Argentina y Chile y espera que el presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da silva, también asista.
Aclaró que ese mecanismo del Pacífico no excluye a la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe por la que México sigue apostando y fortaleciendo.
Al mismo tiempo insistió que le gustaría que la Organización de Estados Americanos (OEA) se reformara y se convierta en un organismo imparcial, que ayude como árbitro auténtico en las diferencias en América, no esté subordinada, y no sea un apéndice de una hegemonía.
Recordó que la Cumbre de las Américas convocada por Joe Biden no fue tal, ni mucho menos, y que la posición de México fue, y sigue siendo, si no participan todos el presidente (él), no asistirá y así lo hicimos.
No participar todos los países de América, excluir a varios, dijo, es una vergüenza, una afrenta a nuestra política exterior. ¿Cómo un presidente de Estados Unidos no va a querer que esté presente otro?, se preguntó.
Recordó el episodio de una cumbre extraordinaria de las Américas en Monterrey bajo el gobierno del expresidente Vicente Fox (2000-2006) cuando le dijo al líder de Cuba Fidel Castro, “comes y te vas”, porque va a venir el otro (George W. Bush) y no quiere encontrarse contigo. Fue un gran bochorno para México.
Nosotros, como decía Juárez, estamos con el pueblo todo, sin el pueblo nada, estamos con la integración de toda América, no solamente la integración económica del norte, sino de toda la región, sin exclusiones.
López Obrador recuerda que mañana 8 de noviembre hay elecciones en Estados Unidos “que son muy importantes”. Confía en que haya una unión en América y con el triunfo de Lula en Brasil “hay condiciones inmejorables” porque “es un dirigente con mucho prestigio”.
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