Lógicamente, las noticias no tienen relación alguna y fueron divulgadas por separado, en vísperas de la participación de Macron en la reunión del G-20 de Bali, Indonesia, foro al que no asistirá Putin y en el cual se abordará el conflicto en Ucrania.
Aunque Francia ha sido muy activa en las sanciones contra Moscú, la retórica antirrusa y el envío de armas a Kiev, pese a las advertencias de que esto solo provocará una escalada, Macron es probablemente el líder occidental con más intercambios telefónicos con Putin, al menos una decena desde el comienzo de la guerra en febrero pasado.
El mandatario galo defiende la importancia de mantener el acercamiento y afirmó hace unos días en la COP27 de Sharm El Sheikh, Egipto, que en algún momento habrá que retornar a la mesa de negociaciones para poner fin al conflicto en Ucrania.
También en el Foro de París sobre la Paz, que culminó el sábado, fueron realizados llamados al diálogo Moscú-Kiev, en particular el demandado por el presidente de Guinea Bissau, Umaro Sissoco Embaló, quien instó a Macron a mediar en esa dirección.
Respecto a la Copa del Mundo de Qatar, el Palacio del Elíseo adelantó que el mandatario animará a los campeones defensores si clasifican a una de las semifinales.
La ministra de Deportes Amélie Oudéa-Castera había informado el jueves que viajará a Qatar si Les Bleus avanzan a los cuartos de final.
Francia es una de las selecciones favoritas al título, pero tiene en contra la historia, ya que en las últimas seis décadas ningún país ha retenido la corona, después de la hazaña de Brasil de levantar la copa en 1958 y 1962.
La selección debutará el 22 de noviembre contra Australia por el grupo D, integrado además por Dinamarca y Túnez.
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