Conocida por sus siglas, EPOC, esta enfermedad se define como una serie de padecimientos que en conjunto limitan en gran medida el flujo de aire a los pulmones.
Algunas de las enfermedades que se suman a este cuadro son: bronquitis crónicas, el enfisema, disnea, producción de esputo y la famosa tos del fumador.
Según los especialistas, la EPOC no es solo tos y falta de aliento, realmente se trata de una enfermedad potencialmente mortal que si no es tratada a tiempo, conduce de forma progresiva a la muerte.
En este contexto, la Organización Mundial de la Salud recomienda un grupo de acciones, entre ellas, desarrollar políticas y alianzas en varios sectores de la sociedad para controlar este tipo de enfermedades no transmisibles.
Además, impulsar la reducción de factores que puedan influir en el desarrollo de la enfermedad, como políticas antitabaquismo o regulaciones en la emisión de dióxido de carbono por parte de los vehículos.
A esto se suman mejorar los sistemas de salud frente a este tipo de enfermedades y garantizar el tratamiento a todo aquel que lo padece, y educar a las personas y fortalecer la investigación médica para la cura de este tipo de afección.
Este año el lema elegido para el Día Mundial de la EPOC es «Tus pulmones, de por vida», pues nacemos con un par de estos órganos y son para toda la existencia, de ahí la importancia de mantenerlos saludables y proteger a las poblaciones más vulnerables.
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