Es una historia dolorosa, de desventuras, separación, tristezas, amores, desamores, pero también de esperanza, afirmó su autor en entrevista concedida a Prensa Latina.
Wladimir Vergara, el personaje principal, ingresa a los 11 años en las juventudes comunistas y entra a trabajar en una fábrica que los soviéticos donaron al gobierno de Salvador Allende, donde laboraban muchos militantes de izquierda del Partido Comunista y Socialista.
El 11 de septiembre de 1973 el local es allanado y sus trabajadores son llevados en buses a Valparaíso y concentrados en buques que sirvieron de centro de torturas como el Lebu, donde unos murieron y otros lograron salir con vida.
Se trata, dijo, de un período oscuro, nefasto, donde la realidad derrotó a la ficción y es un tema muy actual.
El niño de la bicicleta azul nos llevará por caminos de un pasado reciente, conocidos para algunos, extraños, sorprendentes e increíbles para otros.
“Yo siempre he pensado que la historia de Chile todavía no está contada. Mientras sigan existiendo desaparecidos, torturados y fusilados que no se sabe dónde están, la historia no está cerrada”, afirmó Aguilera.
Publicado por Lom Ediciones, el texto fue presentado por primera vez en la Feria del Libro de La Serena y también en la de Cuba, y ahora estará en el Bulevard del Libro de la Plaza de Armas de Coquimbo.
“Estoy muy contento con este título porque he tenido muy buenas referencias”, expresó el narrador y ensayista.
Luis Aguilera es autor, entre otros libros, de El andén de los sueños, Un adiós en el aeropuerto de La Habana, Ochún camina sola bajo la lluvia y Yemayá, la virgen del mar de Baracoa, estos últimos ambientados en Cuba.
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