El ministro del Interior, Juan Zapata, confirmó en la noche de este domingo que detuvieron a los siete sujetos que irrumpieron en el centro hospitalario Napoleón Dávila.
Todos los rehenes fueron liberados y gracias a Dios no hay un solo herido, declaró el titular al canal local Ecuavisa.
Poco después el presidente, Guillermo Lasso, se pronunció sobre el suceso en Twitter y destacó el trabajo de las fuerzas del orden “listas para defender a la ciudadanía” ante este nuevo hecho delictivo.
Video en redes sociales permiten ver cómo los individuos tenían como rehén a una enfermera, aunque el mandatario informó que hubo cuatro retenidos.
Ecuador vive una escalada de violencia con una tasa de homicidios que asciende este año a más de 20 por cada 100 mil habitantes.
Desde el 1 de noviembre tuvieron lugar una serie de atentados y motines carcelarios promovidos por bandas asociadas al narcotráfico que conllevaron al Gobierno a declarar estado de excepción en las provincias de Guayas, Esmeraldas y Santo Domingo de los Tsáchilas.
A juicio de expertos en la materia, ese panorama de inseguridad se debe a la guerra de cárteles nacionales e internacionales por el control del narcotráfico y la ineficiente respuesta estatal a esa cuestión.
Para analistas, el estado de excepción por sí solo no resuelve la problemática, sino que son necesarias políticas integrales, incluidas inversiones sociales.
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