Así lo dijo a Prensa Latina en exclusiva el director general de la Oficina de Regulación y Seguridad Ambiental del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de Cuba, Jorge Álvarez.
El experto cubano representa aquí a su país en la primera reunión del Comité intergubernamental para la elaboración de un instrumento internacional jurídicamente vinculante sobre la contaminación por plásticos.
Se trata de un foro en el que participa la directora ejecutiva del Programa de la ONU para el Medio Ambiente, Inger Andersen, así como ministros de Ambiente de la región y representantes de más de 150 países.
La conformación del Comité Intergubernamental de Negociación y las líneas generales del proceso resultan mandato de una resolución de la Asamblea de la ONU para el Medio Ambiente adoptada el 2 de marzo de este año.
Álvarez subrayó la importancia del cónclave, pues «la contaminación de los plásticos y microplásticos, particularmente en los mares, es uno de los problemas ambientales más agudos que confronta el mundo».
Señaló que lo que se debate en este balneario uruguayo no es un acuerdo para eliminar los plásticos, sino la contaminación que provocan.
Ello incluye prescindir de los que pueden ser sustituidos, de los llamados de un solo uso, pero también la discusión comprende la gestión segura de los plásticos a lo largo de todo su ciclo de vida desde su fabricación hasta que se convierten en desecho, explicó.
Acotó que se busca que los plásticos sean tratados con circularidad en su diseño para su cabal aprovechamiento y posterior reciclaje, o en su defecto eliminación segura.
Refirió el propósito de minimizar el uso de determinados aditivos que son tóxicos, como algunos metales pesados y compuestos químicos peligrosos para la salud y la biodiversidad.
El funcionario enfatizó en el tema de la responsabilidad y la instrumentación de una normativa, pues en muchas ocasiones los plásticos se vierten al mar y afectan a los que los producen y consumen, y al que no.
“Al que lo maneja bien y al que los maneja mal, pues muchas veces depende del movimiento de corrientes marinas, de los vientos, entre otros factores”, argumentó.
Dijo que en la reunión Cuba defiende un convenio o instrumento balanceado, flexible con los países en vías de desarrollo, en particular con los pequeños Estados insulares.
Lo que acordemos no debe atenerse solo a medidas de prevención o control. También a mecanismos de implementación, financiamiento y acceso a las tecnologías, remarcó.
Y abundó al respecto: para sustituir, manejar, reciclar e incluso eliminar los desechos por plásticos se precisa de tecnologías y recursos.
Sobre el tema puntualizó que por ello la delegación cubana señaló aquí las consecuencias del bloqueo que por más de 60 años ejerce Estados Unidos sobre su país y el impacto que tal política podría tener para los objetivos de cualquier instrumento a aplicar en la materia.
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