A mediados del presente año, el primer ministro singapurense, Lee Hsien Loong prometió eliminar dicho mandato.
«Ha llegado el momento de eliminar la Sección 377A», indicó el ministro de Justicia, Kasiviswanathan Shanmugam, tras un debate de dos días en el Parlamento.
«Humilla y perjudica a los homosexuales. La mayoría de ellos no causan daño a nadie, sólo quieren vivir pacíficamente y con tranquilidad y ser aceptados como parte de la sociedad igual que cualquier otro singapurense», añadió.
En este sentido, el Parlamento también modificó la Constitución para garantizar que sea la cámara el único organismo con autoridad para definir qué es matrimonio, que en la actualidad es exclusivo de los enlaces entre mujeres y hombres.
Los grupos Lgbtq celebraron la derogación de esta norma cuando se anunció, pero también manifestaron preocupación por la enmienda constitucional relacionado con el matrimonio.
Por el momento, la mayoría de la población afirma estar a favor de acabar con esta ley, pero el 55 por ciento se muestra en contra de las uniones legales entre personas del mismo sexo, según una encuesta de Blackbox Research.
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