El 2 de diciembre de 1902, 11 países se reunieron en la Primera Convención Sanitaria Internacional de las Repúblicas Americanas y fundaron la Oficina Sanitaria Internacional, con el objetivo de enfrentar la propagación de la fiebre amarilla a través de las fronteras en una época de rápida expansión del transporte marítimo.
Según la página web de la OPS, desde entonces la organización acciona incansablemente para combatir las enfermedades, prolongar la vida y promover la salud física y mental de todos los habitantes de las Américas, sin dejar a nadie atrás.
Ahora que la región comienza a salir de casi tres años de pandemia de la Covid-19, que marcó desigualdades profundas en materia de salud, nunca antes he estado más convencida de que la creación de la OPS hace 120 años fue un acto de previsión increíble, afirmó su directora, Carissa F. Etienne.
«Hoy, la organización sigue trabajando con los países bajo el principio rector de que la salud no es un privilegio, sino un derecho humano fundamental», destacó.
Durante estos años la OPS ha impulsado a las Américas para convertirse en la primera región del mundo en eliminar la viruela y la poliomielitis, y poner fin a la transmisión endémica de la rubéola, la rubéola congénita y el tétanos neonatal.
También desempeña un papel fundamental en la consecución de un aumento promedio de 30 años en la esperanza de vida en el continente americano, así como en la reducción significativa de la mortalidad infantil y la ampliación de la cobertura de salud entre las poblaciones en situación de pobreza y vulnerabilidad.
En los últimos tres años, la OPS trabajó en la primera línea de respuesta a la Covid-19 en la región, con apoyo a los países en el equipamiento de laboratorios y pruebas diagnósticas, además mediante su Fondo Rotatorio adquirió y entregó más de 151 millones de dosis de vacunas contra esa enfermedad a más de 30 naciones.
La OPS es el organismo especializado en salud del sistema interamericano y actúa como oficina regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud, cuenta con 35 Estados miembros y cuatro asociados.
Bajo su liderazgo se establecen las prioridades sanitarias y moviliza la acción para abordar los problemas de salud en toda América.
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