“Todas tenemos historias que contar y proyectos que necesitan financiación”, expresó entonces McDormand al abogar por más presencia femenina en la industria cinematográfica, un sector en deuda permanente con las mujeres por la baja representación que estas tienen delante y detrás de las cámaras.
Quien decida hacer el ejercicio de observar con detenimiento los créditos de las películas, ya sean de ficción o documentales, encontrará que en la inmensa mayoría de los casos predominan los nombres masculinos, tanto entre los miembros del elenco como entre quienes conforman el equipo artístico y técnico de la obra.
Una investigación sobre las 100 cintas más taquilleras estrenadas en Estados Unidos en 2021 arrojó que solo en un siete por ciento hubomayoría de personajes femeninos, mientras en el 85 por ciento predominaron los hombres y en un ocho por ciento existió igual cantidad de roles para ambos sexos.
De acuerdo con ese análisis, realizado por el Centro para el Estudio de la Mujer en la Televisión y el Cine de la Universidad Estatal de San Diego, California, ellas desempeñaron papeles protagónicos en un 31 por ciento de los largometrajes, en tanto el 57 por ciento contó con intérpretes masculinos en sus roles principales.
Al mismo tiempo, en las 250 películas más taquilleras dela nación norteña el pasado año solo hubo un 17 por ciento de directoras y guionistas, un 22 por ciento de editoras, un siete por ciento de directoras de fotografía y un 36 por ciento de productoras.
Esas disparidades no se circunscriben solo al ámbito de Hollywood. Un informe presentado en 2018 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura arrojó que solo una de cada cinco cintas europeas es dirigida por féminas, mientras que continúa una baja participación de las mujeres en los puestos creativos más importantes.
Como advierten esas y otras fuentes, tales desigualdades estuvieron acompañadas por la persistencia de estereotipos de género que se reproducen una y otra vez, lo cual resulta preocupante dada la gran influencia social del cine.
Medios especializados consideran que, cuando se abren mayores posibilidades para realizadoras, guionistas y otras profesionales del séptimo arte, se da lugar a una amplia gama de experiencias cinematográficas más desafiantes, innovadoras y radicales.
Un artículo de la revista británica Far Out titulado “Una historia esencial de las mujeres cineastas” resaltó la obra de directoras como Greta Gerwig, AvaDuVernay, Jane Campion, CelineSciamma, Chloé Zhao y Julia Ducournau, de quienes sostuvo que han dado lugar a algunas de las mejores películas de las últimas décadas.
De acuerdo con la publicación, los triunfos de esas y otras realizadoras son el resultado de generaciones de logros femeninos en el sector, luchando constantemente contra el dominio masculino sistémico para mejorar la industria cinematográfica y traer diversidad y vitalidad al séptimo arte contemporáneo.
(Tomado de Cuarta Pared, suplemento cultural de Orbe)