Imágenes difundidas por varios medios de prensa locales mostraron a caravanas de refuerzos de las divisiones 30 de Guardia Republicana y 25 de Tropas Especiales, que se dirigen hacia las ciudades de Ain Arab y Manbej, en el norte de Alepo, cerca de la frontera con el vecino norte.
Las columnas incluyen camiones que transportan tanques, vehículos artillados, material logístico y blindados de transporte de soldados.
Esto ocurre en medio de informaciones filtradas y publicadas por diversos medios de prensa sobre negociaciones que se llevan a cabo para la retirada de las llamadas Fuerzas Democráticas de Siria “FDS” de todas las zonas ubicadas al este del río Éufrates y entregar su control al Ejército sirio.
Estas negociaciones se efectúan entre oficiales rusos, sirios, turcos y de las FDS y, según las filtraciones, se llegó a un acuerdo inicial para la retirada completa de las formaciones armadas kurdas de Ain Arab y Manbej y el restablecimiento de las instituciones de servicios.
Indicaron lsas versiones que un punto de discrepancia se mantiene sin resolver y es el de la Policía perteneciente a las FDS, que aunque se planeó que reciba sus órdenes del Estado sirio, Damasco insiste en su disolución y que las fuerzas de seguridad interna gubernamentales entren a dichas ciudades.
Türkiye lanzó el 20 de noviembre pasado una nueva operación militar denominada Garra-Espada contra las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) en las provincias de Alepo, Raqa y Hasakeh.
Ankara acusa a estas milicias kurdas separatistas y patrocinadas por Estados Unidos de estar detrás del atentado en Estambul ocurrido el 13 de noviembre, en el que murieron seis personas y 81 resultaron heridas.
Bajo el argumento de combatir y erradicar a las FDS, los militares turcos y agrupaciones armadas ilegales controlan desde 2018 extensas áreas en las provincias de Idlib, Alepo, Raqa y Hasakeh.
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