El faraónico proyecto, valorado en seis mil millones de dólares incluye una zona industrial y otra agrícola y un aeropuerto internacional y cubrirá 400 mil acres, según las precisiones del ministro de Finanzas sudanés, Gibril Ibrahim, durante la ceremonia de firma del acuerdo, a cargo de AD Ports Group e Inversiones Invictus.
Las provisiones del acuerdo otorgan al consorcio constructor el derecho a desarrollar, administrar y operar el Puerto y los bienes económicos de la zona, aclararon fuentes oficiosas en los EAU.
El AD Ports Group es propiedad de un fondo soberano emiratí; Invictus Investment es encabezado por Osama Daoud Abdellatif, presidente del Grupo Dal, el mayor conglomerado de los EAU, acorde con precisiones públicas disponibles.
Además de los empleos que creará la construcción del puerto, la inyección de dinero fresco viene a las autoridades castrenses sudanesas como sol en día de borrasca, debido a las constantes protestas populares en demanda del retorno de los militares a los cuarteles y la celebración de elecciones generales.
Días atrás las autoridades castrenses sudanesas alcanzaron un entendimiento con una coalición de partidos políticos y gremios profesionales para la formación de un gobierno de civiles encargado de convocar comicios generales, pero otro grupo opositor, los Comités de Resistencia, lo impugnaron.
mem/msl