Hasta el momento se produjeron mil 864 fuegos, el seis por ciento menos respecto a la temporada anterior, pero la devastación es superior, con 26 mil 759 hectáreas de bosques quemadas y falta aún la etapa del verano austral, más cálida y seca.
De acuerdo con la Conaf permanecen seis incendios en combate, la mayor parte en Valparaíso y en la Región Metropolitana, donde está la capital, lo cual provoca que cuatro comunas sigan en fase de alerta roja.
En las regiones de O’Higgins y Biobío están bajo control, aunque no del todo extinguidos, los siniestros registrados en los últimos días.
Recientemente el presidente chileno, Gabriel Boric, inspeccionó por vía aérea las zonas afectadas por las llamas, donde señaló que viene un verano muy difícil y prometió mejorar las condiciones de los voluntarios.
La Conaf cuenta con 286 brigadas capacitadas para enfrentar estos desastres, en las que trabajan tres mil personas, y a ellas se suman 37 helicópteros, 24 aviones y dos aeronaves de coordinación.
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