Netanyahu intenta cambiar la realidad del conflicto con conceptos coloniales racistas, cuyos objetivos buscan perpetuar la ocupación, denunció el Ministerio de Relaciones Exteriores y Expatriados en un comunicado.
Los planes de Netanyahu representan la más amplia y mayor incitación a la violencia, y un llamado explícito al ejército israelí y a las milicias de colonos para que intensifiquen sus ataques contra los palestinos, sus tierras y propiedades, afirmó.
También Nabil Abu Rudeina, portavoz de la Autoridad Nacional Palestina, criticó las palabras del próximo jefe de Gobierno israelí.
No habrá seguridad ni paz en Oriente Medio sin un estado palestino, advirtió Rudeina.
En una reciente entrevista Netanyahu expresó que su visión de paz se basará en permitir un autogobierno a los palestinos, pero sin otorgarles soberanía plena ni poderes en materia de seguridad.
Esas declaraciones son nulas y constituyen un desafío a las decisiones internacionales y en particular a la Resolución 2334 del Consejo de Seguridad de la ONU, que define como ilegal todas las colonias en tierras palestinas, incluida la Jerusalén Oriental, subrayó Rudeina.
“El pueblo palestino tiene derecho a establecer un estado independiente con Jerusalén Este como su capital, y esta es la base para establecer una paz justa”, reafirmó.
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