Sancionada de manera provisional desde octubre, la africana alteró las pruebas y apeló al uso de un producto prohibido, la triamcinolona, un corticoide todavía autorizado en algunas formas en 2021, antes de ser totalmente vedado desde enero pasado en todas las competiciones, precisó la entidad.
Kipyokei, de 28 años, ganó en octubre de 2021 el maratón de Boston, uno de los seis más importantes del mundo, prueba en la que empleó la triamcinolona.
Más tarde recurrió a documentos falsos procedentes de un hospital para justificarse, actitud que le valió una sanción agravada.
Por eso, la AIU la despojó de su victoria en Boston y la suspendió del atletismo hasta junio de 2028.
Además, la entidad anunció un castigo de cinco años para otra keniana, Purity Cherotich Rionoripo, debido a un control positivo de furosemida (diurético) y el uso también de documentos falsos.
Rionoripo, de 29 años, conquistó en especial el maratón de París en 2017 y el de Praga en 2021.
El atletismo keniano arrojó más de 25 casos de dopaje en el 2022 y el gobierno de esa nación africana prometió en noviembre la inversión de cinco millones de dólares por año durante cinco años para financiar las pruebas para detectar el uso de sustancias prohibidas (test, personal, investigaciones).
La Federación Internacional de Atletismo (World Athletics) renovó en noviembre su confianza hacia las autoridades locales y la federación keniana por su cooperación con la AIU.
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