De acuerdo con el diario The Hill, el plan incluye mil millones de dólares en concepto de autorización presidencial de reducción, que permite al Ejército norteamericano retirar armas de sus propios arsenales para destinarlas a Kiev.
Los otros fondos llegarán a través de la llamada Iniciativa de Asistencia a la Seguridad de Ucrania, lo cual significa que el Departamento de Defensa comprará directamente a la industria.
El paquete incluye también munición adicional para sistemas de cohetes de artillería de alta movilidad (Himars), proyectiles, 37 vehículos resistentes a las minas y protegidos contra emboscadas, seis camiones utilitarios blindados, misiles antirradiación y otros equipos.
Estados Unidos ya comprometió más de 21 mil millones de dólares en la supuesta ayuda a Ucrania desde que comenzó la operación militar rusa en ese territorio de Europa del Este, en febrero de este año.
Moscú advirtió sobre posibles desvíos de las armas occidentales al mercado negro, pues ni las autoridades de Kiev ni los países que las proporcionan saben en qué manos acaban.
Al decir del representante permanente del Kremlin ante Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, ello plantea un posible aumento del terrorismo y una amenaza para la seguridad mundial.
De acuerdo con el jefe del Servicio de Inteligencia Exterior ruso, Serguei Narishkin, la Casa Blanca busca por todos los medios mantener el conflicto, pese a las grandes pérdidas de las fuerzas armadas de ese país y la depauperación de la economía de las naciones europeas afectadas por la crisis energética. Por su parte, el Quincy Institute for Responsible Statecraft señaló que la facilitación de equipos a esa nación europea, sin una estrategia diplomática para poner fin a las tensiones, corre el riesgo de alargar el diferendo, acrecentar el sufrimiento humanitario, o incluso escalar a una confrontación directa entre Washington y Moscú.
El anuncio de la nueva asignación coincide con la presencia en esta capital del presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, mientras los legisladores norteamericanos analizan la propuesta de 45 mil millones de dólares en fondos de emergencia para ese país, una medida que está pendiente de aprobación en el Congreso.
Una batería Patriot típica incluye un radar que detecta y rastrea objetivos, computadoras, equipos de generación de energía, una estación de control de combate y hasta ocho lanzamisiles, cada uno con cuatro misiles listos para disparar, detalló el canal CNN.
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