El presidente de la AIBA, Umar Kremlev, mediante una carta dirigida a todas las Federaciones Nacionales, recalcó que «los Juegos Olímpicos son un activo deportivo global que pertenece a los deportistas de todos los deportes y no pueden ser una herramienta de extorsión por razones puramente políticas, como sucede ahora».
La AIBA continuará luchando por sus deportistas para asegurarse de que tengan todas las oportunidades y el mismo derecho a participar en los Juegos Olímpicos, sin discriminación y separando la política del deporte, lo que ahora se ha convertido en el enfoque normalizado, añadió.
Todo parte, según asegura Kremlev, por la renovación del acuerdo de patrocinio de la AIBA con la empresa rusa Gazprom, lo cual llevó al COI a presuntamente estudiar la cancelación del boxeo como deporte en los próximos Juegos Olímpicos de París.
Estamos siendo criticados por renovar un acuerdo comercial que se hizo por primera vez en 2021 (antes de comenzar la guerra entre Rusia y Ucrania). La renovación de este acuerdo confirmado por las Federaciones Nacionales en el Congreso Ordinario de la AIBA es la principal causa, apostilló el dirigente.
Kremlev fue más allá y dejó claro que «la persecución a los deportistas de la AIBA continuará hasta que se logre el control final del boxeo y sacar a sus dirigentes. La discriminación basada en la nacionalidad va en contra de la Carta».
El máximo dirigente del boxeo aficionado ratificó su intención de hacer «muchas iniciativas y reformas de gobernanza para reparar el daño a la reputación del pugilismo causado por el expresidente de AIBA, miembro del COI y de la junta ejecutiva, Ching-Kuo Wu».
Así, Kremlev enfatizó que el boxeo seguirá trabajando fuerte para limpiar su imagen, muy dañada en la última década por la corrupción y el tráfico de influencias generados durante las administraciones anteriores, pero, aclaró, rechaza la manipulación del deporte y los deportistas como herramienta geopolítica.
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