Según comunicó este miércoles el portal local Dumskaya, la Plaza de Catalina II está acordonada y con vehículos pesados desplegados, y solo permiten el paso hasta el monumento a los trabajadores de los servicios públicos.
El 30 de noviembre, los diputados del Ayuntamiento de Odesa votaron a favor de desmantelar y retirar este monumento en honor a Catalina la Grande y sus allegados.
Una vez finalizados los trámites necesarios, las esculturas se trasladarán al museo de arte local.
El monumento a los fundadores de la ciudad fue erigido en 1900, y después desmontado en 1920, para regresar a su emplazamiento original en 2007.
La llamada guerra contra los monumentos comenzó en Ucrania tras el golpe de Estado de 2014 y la puesta en vigor de la ley de descomunización.
La citada legislación implica el desmantelamiento de monumentos conmemorativos, así como el cambio de nombre de lugares topográficos asociados a la historia soviética y lo relacionado con Rusia.
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