En total las ventas al exterior de este crustáceo alcanzaron los 4,3 mil millones de dólares, precisó el secretario general de la Asociación de Exportadores y Productores de Productos Acuícolas de Vietnam (Vasep, por sus siglas en inglés), Truong Dinh Hoe.
Lograr una cifra tan alta en tiempos difíciles fue posible gracias a los tratados de libre comercio (TLC) suscritos por el país, en particular el Acuerdo Integral y Progresivo de Asociación Transpacífico (Cptpp), señaló.
Esos convenios, explicó, dieron al camarón vietnamita una ventaja arancelaria sobre los países que no son miembros del TLC y permitieron que los productos del mar ingresaran a los mercados extranjeros con mayor facilidad.
Al respecto, precisó que el Cptpp favoreció que las exportaciones del producto a Canadá, México y Australia aumentaran un 30 por ciento, lo cual generó ingresos estimados en 2,9 mil millones de dólares.
El 2022 se caracterizó por el debilitamiento de la demanda de camarones, dada la alta inflación registrada en Estados Unidos y la Unión Europea, lo cual provocó muchas dificultades al sector, que no obstante logró salir a flote, manifestó el presidente de la empresa Sao Ta Foods JSC, Ho Quoc Luc.
Por otra parte, añadió en declaraciones reproducidas por la agencia de noticias VNA, la depreciación del euro frente a la moneda vietnamita (dong) y los crecientes costos de transporte en los principales países importadores alimentaron esta situación y se sumaron a sus facturas.
Frente a esas condiciones desfavorables, la compañía duplicó la cantidad de productos del mar procesados para apuntar a mercados alternativos de alto nivel, como Japón, en aras de compensar sus reducidas ganancias, lo cual –dijo- le permitió garantizar cierto éxito.
jcm/mpm