La Unión Nacional de Educadores (UNE), la Unión General de Trabajadores del Ecuador, el Partido Socialista, el movimiento Unidad Popular y el colectivo Somos Agua se pronunciaron contra los cuestionamientos que estarán en la boleta el venidero 5 de febrero.
La presidenta de la UNE, Isabel Vargas, afirmó que es una consulta mañosa que no resuelve los problemas estructurales del país y consideró que para combatir la delincuencia o el narcotráfico, como pretende el Ejecutivo, se debe invertir en educación pública y de calidad.
En un acto simbólico frente al Palacio de Carondelet, sede del Gobierno, el excandidato presidencial Yaku Pérez, quien ahora es líder del movimiento Somos Agua, también llamó a votar No en la consulta.
Lasso no tiene autoridad moral para luchar contra la corrupción porque está involucrado en escándalos como los Pandora Papers y en el más reciente caso El Gran Padrino, sobre una supuesta trama de sobornos en empresas públicas, apuntó Pérez.
El rechazo a la consulta popular se hizo explícito también por parte del Comité Popular 15 de Noviembre, que incluye a varias organizaciones de izquierda, por el partido Pachakutik y por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador.
Igualmente, están contra el procedimiento la Federación de Estudiantes Universitarios y colectivos agrupados en la campaña Ecuador dice NO.
Para ellos, el Ejecutivo gasta en publicidad ganar votos a su favor y aprobar una consulta que en realidad busca mejorar su imagen y acumular más poder al capturar las funciones de control del Estado, como la Fiscalía o las superintendencias, con el fin de garantizar la impunidad.
El venidero 5 de febrero más de 13 millones de ecuatorianos están convocados a las urnas no solo para opinar sobre el referendo, sino para elegir prefectos y viceprefectos, alcaldes, concejales y vocales de juntas parroquiales.
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