Las últimas informaciones dan cuenta de cinco heridos graves y de las complejidades que enfrentan esas labores, pues continúan las nevadas en el lugar, los acumulados son espesos y es muy posible la ocurrencia de nuevos desprendimientos.
El Gobierno desplegó más de mil profesionales y, aparte de los drones y las maquinarias de trabajo, les entregó linternas, walkie-talkies y otros dispositivos de emergencia para mantenerlos localizados en caso de más avalanchas. Hasta el momento los rescatistas abrieron un canal de 350 metros y llaman constantemente a los celulares de las víctimas para precisar su ubicación.
Según se supo, la mayoría de las personas dentro del túnel eran tibetanos que volvían a sus sitios de residencia y muchos vehículos chocaron porque la autopista estaba resbaladiza y el volumen de nieve superaba el metro de altura.
El trágico incidente ocurrió en la noche del martes, cuando una avalancha de nieve selló la salida de un túnel en la carretera que conecta los poblados de Medog y Pad, en el condado de Nyingchi.
Los trabajos de rescate se realizan con celeridad y con las esperanzas disminuidas por encontrar más sobrevivientes, pues los desaparecidos llevan más de tres días atrapados en medio de bajísimas temperaturas.
El condado de Nyingchi se caracteriza por ser muy montañoso y a un nivel de más de cuatro mil 500 de altura sobre el nivel del mar.
Actualmente está bajo alerta por desastres naturales debido a la alta probabilidad de que se produzcan más avalanchas.
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