Las políticas estadounidenses equivocadas en el Medio Oriente, en particular Siria, destruyeron los logros de desarrollo político, económico y social alcanzados durante décadas, dijo el diplomático durante una sesión del Consejo de Seguridad dedicada a debatir la situación política y humanitaria en esta nación.
Consideró que el comportamiento destructivo y desestabilizador de Washington es el que trajo la muerte a los sirios, para convertir a millones en refugiados, desplazados y personas que carecen de seguridad alimentaria.
Según el delegado, el enfoque de caos creativo adoptado por las sucesivas administraciones estadounidenses se basó en la provocación de problemas para encender tensiones y luego conflictos.
Denunció que se gastaron cientos de millones de dólares en campañas mediáticas para engañar a la opinión pública y distorsionar la imagen del Estado sirio, y también para crear estructuras y grupos armados ajenos a la sociedad, cuyo único objetivo es servir a los intereses geopolíticos de Estados Unidos.
El embajador aclaró que Washington y sus aliados en la OTAN inventaron varios pretextos para intervenir directamente en Siria, incluso manipularon las disposiciones del derecho internacional y la Carta de las Naciones Unidas para justificar su presencia militar ilegal en este territorio.
Esta presencia contribuyó en gran medida a amenazar la integridad y unidad de las tierras sirias, además de saquear el petróleo y el trigo, causando pérdidas por un valor superior a los 100 mil millones de dólares, concluyó.
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