Al catalogar la determinación de la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) como “abusiva y arbitraria”, la empresaria se preguntó qué economía se levanta sin el motor de las Pymes, por lo que se opuso categóricamente al alza en la factura de energía eléctrica.
La propuesta de la JSF se destinaría a pagar por los próximos 30 años a los acreedores de la deuda de la estatal Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), la cual no ha sido auditada, tal como reclaman diversas organizaciones.
La propuesta, como parte de la privatización de la AEE, comenzaría con un “cargo híbrido” para el pequeño comerciante de aproximadamente 16,25 dólares en adelante más 1,5 centavos hasta 500KV/hr más 3,0 centavos por el exceso de 500kv/hr.
Mientras, en el caso de comercios con distribución primaria de mayor consumo el cargo comenzará en 800 dólares base más 1,45 centavos por KV/hr.
“Nuestras Pymes no aguantan más; la economía no se puede sostener con tanto aumento, no podemos con una carga más”, afirmó Aponte Rodríguez, para quien el futuro se muestra desolador para los pequeños empresarios y el pueblo en general.
Consideró que ante la situación que se avecina, “no podremos salir del hoyo; el gobierno está para proteger, tomar decisiones correctas y agilizar los procesos, pero no aguantamos más”.
La presidenta del CUD aseguró que la caja no se cuadra empobreciendo cada día más a un pueblo, como tampoco se estimula la economía con tantos cargos, por lo que se sigue atentado contra el sector productivo del país.
Indicó que los clientes subsidiados, aquellos que gozan de ayudas gubernamentales y de una tarifa eléctrica preferencial, ni los municipios, muchos de los cuales se encuentran insolventes, no sufrirán ningún alza, por lo que no contribuirán al pago la deuda de la AEE, de 10 mil millones de dólares.
“Entendemos que todos tenemos que contribuir de alguna forma y si bien se quiere ayudar a estos sectores se debe establecer un límite de consumo sobre el cual gozar de la exención y que paguen por el exceso”, dijo Aponte Rodríguez.
Advirtió que alzarán sus voces para que los lideres políticos del país tomen acción ante lo que catalogaron como un abuso y atropello al pueblo.
ʺEl motor que mueve la economía de Puerto Rico son nuestros pequeños y medianos empresarios y nos están destruyendo poco a poco”, insistió.
Aponte Rodríguez recomendó al gobernador de Puerto Rico, Pedro R. Pierluisi, y a los miembros de la Legislatura, a tomar acción inmediata y a reunirse con la junta de control fiscal, impuesta por Washington, “para encontrar otras alternativas que no promuevan aún más el empobrecimiento de un pueblo que ya agoniza”.
En días recientes se ha establecido un incremento de quiebras de negocios, cifra que exacerba el volumen de negocios que cerraron como resultado de los desastres naturales —ciclones y terremotos— y la pandemia de Covid-19.
La presidente del CUD refirió que las PyMES viven un momento incierto ante el que claman acción firme por el liderazgo político y económico de Puerto Rico y Estados Unidos.
“Una vez más la junta de control fiscal incumple con su responsabilidad de promover programas de desarrollo económico para que algún día podamos ser un país autosuficiente”, insistió la comerciante.
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