Los hostigamientos que incluyen escupir, maldecir y empujar a los sacerdotes en los callejones de la Ciudad Vieja se volvieron rutinarios, alertó el periódico The Jerusalem Post.
Jóvenes de aspecto ultraortodoxo acuden en grupos para identificar a los sacerdotes con el fin de acosarlos y humillarlos, pero hasta ahora la policía no dio ni la más mínima respuesta, criticó.
El rotativo afirmó que en el Barrio Armenio los residentes afirman que no reciben una respuesta adecuada ni se les da seguimiento a las denuncias presentadas ante las autoridades.
A principios de este mes, atacantes judíos profanaron un cementerio cristiano en el Monte Sión, donde los fieles de esta religión creen que ocurrió la Última Cena de Jesús.
La lista es muy larga, lo que causa una creciente preocupación, subrayó la publicación.
La campaña es contra todos los cristianos, lamentó Amnon Ramon, investigador principal del Instituto de Estudios Políticos de Jerusalén.
“No son solo los armenios, aunque el hecho de que el Barrio Armenio esté más cerca del Barrio Judío, de donde provienen la mayoría de los atacantes, los expone más”, explicó.
En las últimas dos décadas, los armenios abandonaron Jerusalén en números récord debido a los problemas económicos y políticos que aquejan a la ciudad.
En 1948 vivían allí unos 15 mil, pero ahora en todo Israel solo quedan cuatro mil, la mitad de los cuales viven en el Barrio Armenio, detalló el diario.
Los jóvenes judíos “están sujetos a la creciente influencia de los rabinos jaredíes (ultraortodoxos), que se están volviendo cada vez más extremistas y señalan con el dedo a los cristianos”, alertó un rabino que evitó ser identificado.
Para ellos, la mayor amenaza para los judíos en Israel son los cristianos, a quienes ven como meros idólatras que deben ser expulsados, apuntó.
A principios de este mes, el patriarca latino de Jerusalén, Pierbattista Pizzaballa, condenó los sistemáticos ataques de extremistas israelíes contra los cristianos en esa ciudad.
En un comunicado, el arzobispo católico destacó que recientemente un judío estadounidense ingresó a la Iglesia de la Flagelación y destruyó el rostro de una estatua de Jesús.
Este es el quinto incidente que ocurre en las últimas semanas, alertó el religioso, quien resaltó que varios turistas fueron atacados hace unos días por un grupo de judíos.
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