Aunque reconoció la existencia de muchos obstáculos a sobrepasar en la sociedad: el desempleo, la discriminación, la pobreza, la mala salud (física y mental) y la igualdad de género, destacó las oportunidades que se abren mediante consultas y legislaciones.
Comentó la creación en septiembre de 2018 del Comité de Justicia Social, integrado por 23 miembros y con una representación de los sectores público y privado, así como los sindicatos.
El principal objetivo de ese órgano –subrayó- es examinar y formular recomendaciones al Ejecutivo nacional, directamente o a través de la asociación social.
Mencionó entre los aportes del Comité la elaboración de una política y legislación para proteger a los más vulnerables, como –ejemplificó- a la población en general a través de la Carta de Barbados.
A los niños –amplió- va dirigida la ley de Protección de la Infancia, para los mayores trabajan en el proyecto de Política sobre el Envejecimiento y otro busca mejorar la vida de las personas con discapacidad.
Los tres grupos anteriores y similares merecen protección, justicia, equidad, respeto y acceso a la protección social, remarcó en el mensaje por la fecha.
Esta isla caribeña organizó recientemente una consulta con organizaciones confesionales, en la cual los líderes dialogaron sobre asuntos que afectan a todos los segmentos de la sociedad.
El foro abordó la Política Nacional de Bienestar, la ayuda en caso de catástrofe, la necesidad de consejeros dedicados a analizar los problemas de salud mental de los niños tras la Covid-19, y puso de relieve la tolerancia de todos los credos, mientras sobresalió que el propósito esencial era contribuir al desarrollo de una sociedad equitativa.
El Día Mundial de la Justicia Social se celebra desde 2009, después que una declaración de la 62 sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas estableciera el 20 de febrero.
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