Los datos precisan que de los 20 días que lleva el mes solo en seis ocurrieron fatalidades atribuibles a las acciones de los grupos delictivos.
Los primeros 15 días de este mes registraron una reducción del 70 por ciento en el índice de crímenes en comparación al mismo período del año anterior el cual alcanzó cifras de hasta 14 muertes diarias a causa de la violencia.
Las estadísticas oficiales muestran que enero se convirtió en el mes más seguro en 201 años de historia local, cerrando con 11 homicidios y sumando 22 días sin crímenes contra la vida.
La letalidad disminuyó como resultado de la aplicación del Plan de Control Territorial y el estado de excepción.
Por otra parte, en las últimas jornadas se incrementó la acción de la PNC y la Fuerza Armada en áreas rurales del país, donde las pandillas intentan sobrevivir a la ofensiva que las desplazó de las ciudades.
Al menos 200 campamentos en zonas montañosas fueron desarticulados como parte del programa gubernamental para proteger a la población empeñada en las cosechas de café y ahora en el corte de caña de azúcar.
Con el fin de prevenir delitos de terroristas en contra del sector agrícola, las fuerzas de seguridad protegen a los trabajadores que cultivan y cortan caña de azúcar y otros cultivos en el país, puntualizó un informe de la PNC.
La institución detalló que equipos integrados por la Policía Rural y fuerzas especiales del Ejército se encargan de efectuar patrullajes de rutina en busca de criminales y para evitar que grupos terroristas o de delincuencia común cometan hechos delictivos en contra de la población.
Por otra parte, la presencia de policías y soldados disminuyó al mínimo el hurto y robo de ganado, principalmente, en el departamento de Chalatenango donde predominan las zonas del cultivo y ganadería.
Las autoridades continúan golpeando la logística de las maras con el decomiso de armas, vehículos y fuertes sumas de dinero en efectivo.
Esta semana fueron detenidos en zonas del Departamento de Sonsonate (oeste) tres personas a las que se les ocupó un fusil M16, una pistola, un cargador y 10 cartuchos, mientras en varias oportunidades fue incautado material bélico a los pandilleros, entre ellos lanzacohetes y fusiles con mira telescópica para realizar atentados a distancia.
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