A través de la aplicación Lebquake, el instituto confirmó que el temblor, de una magnitud de 4 en la escala de Richter, es una réplica tras la actividad sísmica de anoche en la provincia turca de Hatay y descartó cualquier posibilidad de tsunamis en Líbano.
Mediante un comunicado, el Centro aclaró que es normal la ocurrencia de réplicas después de un gran terremoto y llamó a los ciudadanos a no tener pánico ante el peligro de olas de tsunami en el país, según el sistema de alerta temprana en el Mediterráneo.
Ayer, pobladores de la ciudad capital y del norte libanés volvieron a salir a las calles al sentir movimientos sísmicos, como consecuencia de dos terremotos de magnitud 6,4 y 5,3 que sacudieron la zona fronteriza turco-siria.
En este contexto, el Ministerio de Educación anunció el cierre de todas las escuelas públicas y privadas para esta jornada y asignó a los responsables de la gestión de los centros de enseñanza inspeccionar nuevamente la ingeniería en los edificios para asegurarse de que no haya grietas o peligros de derrumbe.
Anteriormente, el Gobierno interino activó el Comité de Coordinación de Operaciones de Crisis y Desastres, en el marco de la coordinación y movilización de esfuerzos para la respuesta a desastres sísmicos en la nación levantina.
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