El secretario general de la organización, Ahmed Aboul Gheit, advirtió que las sistemáticas violaciones de Tel Aviv amenazan con provocar un estallido social en los territorios ocupados, precisó en un comunicado Jamal Rushdi, vocero del funcionario.
Según Rushdi, Aboul Gheit acogió con beneplácito la reciente declaración del Consejo de Seguridad de la ONU que rechaza la decisión de Israel de ampliar la colonización en Cisjordania.
Durante una reunión el lunes último para abordar la situación en Oriente Medio, ese órgano de Naciones Unidas criticó toda medida unilateral que impida la paz, incluida la construcción de nuevos asentamientos y la confiscación de tierras palestinas.
Esa declaración refleja el consenso internacional de rechazo a las peligrosas políticas del gobierno ultraderechista israelí, subrayó Aboul Gheit.
Este mes la Liga Árabe celebró aquí una conferencia para debatir la situación en Jerusalén, cuya zona oriental se encuentra ocupada desde 1967.
Pese a las numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad, Israel rechaza retirarse de esa área, reclamada por los palestinos como la capital de su futuro Estado.
Como parte de la estrategia para cambiar la demografía de Al Quds (como la llaman los árabes), las autoridades de ocupación desarrollan desde hace años un plan para rodear la zona este de la metrópoli con colonias judías que impidan su conexión con el resto de Cisjordania.
A la conferencia asistieron representantes de alto nivel de los países árabes, de la ONU, la Organización de Cooperación Islámica, la Unión Africana y el Consejo de Cooperación del Golfo, además de líderes religiosos, legisladores, organizaciones no gubernamentales y expertos en derecho internacional.
El evento sirvió para debatir formas de apoyo a los ciudadanos árabes en la urbe mediante inversiones en sectores como la vivienda, la cultura, la salud y la educación.
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