De acuerdo con el canal CNN, los sistemas chocarán con el calor récord en el este y crearán una amenaza para el clima severo del miércoles al viernes.
Los pronósticos de ahora hacen referencia a un ligero riesgo de tempestad desde el extremo noreste del estado de Texas hasta el valle de Tennessee.
También mañana una tormenta separada saldrá de las Montañas Rocosas y traerá una amenaza de clima severo en gran parte del sur.
Existe un riesgo considerado moderado para partes del noreste de Texas y de Luisiana, así como el suroeste de Arkansas y el sureste de Oklahoma, donde hay probabilidad de tornados fuertes, ráfagas de viento dañinas generalizadas y granizo grande.
Con estos temporales además es esperada la ocurrencia de lluvias.
CNN indicó que las precipitaciones de mañana podrían oscilar entre 76 y 150 milímetros, con totales aislados que superen los 150 milímetros.
Ya fueron emitidas alertas de inundación para partes de Arkansas y Tennessee e incluyen a más de cinco millones de personas.
Las tormentas de la pasada semana dejaron árboles caídos, afectaciones a líneas eléctricas, viviendas, escuelas y negocios, cancelaciones de vuelos, así como cierres de carreteras.
En la localidad estadounidense de Norman, Oklahoma, un tornado del pasado domingo dejó al menos una docena de heridos, ninguno de gravedad.
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