Un anuncio de hoy, confirmando el rango de la cita malagueña, cuyos premios son las Biznagas (de distinto color, según el lauro) que alude al tradicional ramillete de jazmines típico de la hermosa ciudad andaluza.
Alguien que cuide de mí, de Elvira Lindo y Daniela Fejerman inaugurará el Festival el 10 de marzo y Como Dios manda, de Paz Jiménez, cerrará el evento el 19 del mes en curso. Ambas cintas españolas se exhibirán fuera de concurso.
Entre los largometrajes latinoamericanos en competición destacan Empieza el baile, de la argentina Marina Seresesky, y El castigo, del chileno Matías Bize.
España tendrá entre otras a 20.000 especies de abejas, de Estíbaliz Urresola, Bajo terapia, de Gerardo Herrero, Una vida no tan simple, de Félix Viscarret.
El Teatro Cervantes de Málaga será el escenario principal de la cita que acogerá más de 200 audiovisuales entre todas sus secciones (largometrajes de ficción, documentales, cortometrajes, series de TV) y una gran variedad de contenidos y actividades paralelas para todos los públicos.
Juan Antonio Vigar, director del festival de Málaga, resaltó que el proceso de selección de audiovisuales responde al modelo por el que apuesta el evento: “Nuestra singularidad es la generalidad. Y en ella han de caber todo tipo de miradas, sensibilidades y narrativas”.
Otras cintas latinoamericanas escogidas son Rebelión, de José Luis Rugeles (Colombia y Argentina); Saudade fez morada aquí dentro, de Haroldo Borges (Brasil); Zapatos rojos, de Carlos Eichelmann (México e Italia); y Desperté con un sueño, de Pablo Solarz (Uruguay y Argentina).
También Las hijas, de Katia G. Zuñiga (Panamá y Chile) y La pecera, de Glorimar Marrero (Puerto Rico y España).
El jurado de la Sección Oficial estará formado el cineasta Manuel Gutiérrez Aragón (presidente); el comunicador Gonzalo Miró; la actriz argentina Julieta Zylberberg; la directora del Festival de Cine de Santiago de Chile (Sanfic), Gabriela Sandoval, y el realizador de cine uruguayo Pablo Stoll.
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