La escala del mandatario en la capital de Gabón, parte de un recorrido que debe culminar el próximo sábado, incluye estancias en Angola, repúblicas del Congo y Democrática del Congo, según el programado difundido a la prensa.
Anoche el visitante, quien muestra signos de alarma por el creciente rechazo al despliegue de tropas de su país en excolonias galas de África, cenó con el presidente anfitrión, Alí Bongo Ondimba, en aparente espaldarazo electoral.
La visita (de Macron) busca respaldar a su candidato y tememos que su participación descarrile el objetivo primario de la cumbre, declaró a la prensa el activista medioambiental Marc Ona Essangui.
En un discurso sobre la política de su país en África el lunes pasado, Macron exhortó a “una relación (bilateral) mutua y responsable” incluidos los temas ambientales, y anunció una reducción de sus fuerzas militares en el continente, sin precisar fechas ni números.
En los últimos meses dos países africanos, Mali y Burkina Faso, mostraron la puerta de salida a los militares galos estacionados en sus territorios y la víspera el segundo abrogó el acuerdo que provee base legal a la presencia castrense francesa.
Las preocupaciones de los aliados atlánticos crecieron tras los pobres resultados de sendas visitas al continente del secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken; y de la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, para crear un contrapeso a la sustancial presencia de Rusia y China en África.
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