«Hechos relativos a joyas, que pueden configurar los delitos de malversación, contrabando y lavado de dinero, entre otros», serán puestos este lunes en conocimiento de esa institución del orden, subordinada a la cartera para medidas legales, escribió Dino en la red social Twitter.
Un collar, anillo, reloj y un par de pendientes fueron un regalo del gobierno de Arabia Saudita a Michelle Bolsonaro, exprimera dama.
Después del presente, un militar, asesor del exministro Bento Albuquerque, de Minas y Energía, intentó traer ilegalmente a Brasil las prendas valoradas en tres millones de euros, el equivalente a 16,5 millones de reales.
Albuquerque estuvo en Oriente Medio en la delegación de Bolsonaro, en octubre de 2021.
Las alhajas fueron decomisadas por agentes de la Receita Federal (órgano responsable de la administración de los tributos federales y el control aduanero), en el aeropuerto de Guarulhos, en Sao Paulo, una vez que resulta obligación declarar cualquier bien que entre al país y pase de mil dólares.
Tal decomiso ocurrió el 26 de octubre de 2021 y hubo cuatro intentos fallidos por recuperar los atavíos, involucrando a tres ministerios (Economía, Minas y Energía y Relaciones Exteriores) y militares.
El 28 de diciembre de 2022, el propio Bolsonaro envió una carta a la oficina del Impuesto sobre Renta de las Personas Físicas para solicitar que los bienes fueran destinados a la Presidencia de la República.
La única manera posible de retirar cualquier artículo confiscado por Hacienda en la aduana es hacer el pago del impuesto de importación, que equivale al 50 por ciento del valor estimado, además de una multa de más del 25 por ciento, por el intento de entrarlo a territorio nacional de forma ilegal.
Para el ministro de la Secretaría de Comunicación de la Presidencia, Paulo Pimenta, el caso «revela detalles espantosos sobre cómo funcionaba el esquema de sobornos, regalos y ventajas ilegales de Bolsonaro, sus familiares y asesores cercanos. Todos merecen ser investigados y sancionados por los delitos cometidos».
Calificó los intentos del exministro Albuquerque de recuperar las joyas de algo «vergonzoso y que muestra la falta de ética de quienes ocuparon cargos en el Gobierno» del excapitán del Ejército, derrotado en urnas en octubre pasado por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
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