En su cuenta en Twitter, el jefe de Estado escribió que tuvo “un encuentro de hermandad” con el General de Ejército de la isla caribeña, en compañía de Rafael Correa, “líderes que siempre nos han brindado su amistad y apoyo”.
Me alegra verlos y ratificar juntos, la vigencia de los sueños de unión por los que luchó el comandante Chávez, destacó.
Maduro recibió la víspera, además, al presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Luis Arce; al comandante Daniel Ortega, de Nicaragua; y a los primeros ministros Ralph Gonsalves, de San Vicente y las Granadinas y a Roosevelt Skerrit, de Dominica.
También dialogó con el líder de Honduras Manuel Zelaya, una vez finalizado el Encuentro Mundial por la Vigencia del Pensamiento Bolivariano del Comandante Chávez en el siglo XXI, al que acudieron más de un centenar de intelectuales y cultores de 60 países de todos los continentes.
En el cierre del evento el General de Ejército de Cuba ratificó que el homenaje de Cuba y su pueblo a Hugo Chávez será acompañarlo y seguirlo siempre.
Raúl destacó que Chávez y sus compañeros de lucha estremecieron a nuestro continente e impactaron la historia contemporánea de nuestra América.
Subrayó que hemos sido marcados por Chávez y testigos de las agresiones y la guerra económica para derrocar el proceso bolivariano, pero también, opinó, hemos presenciado con orgullo que el pueblo venezolano ha sabido defender sus conquistas y no defraudarlo.
El líder cubano subrayó que también hemos sido testigo del liderazgo de Nicolás Maduro para continuar la obra de Chávez y su capacidad de resistir y de vencer.
Aseguró que “Cuba estuvo y estará al lado del pueblo venezolano, al lado de Maduro y de la unión cívico militar del pueblo bolivariano y chavista”.
En su discurso, el líder histórico cubano significó que una de las fortalezas del liderazgo de Chávez era su lealtad a los principios y a los compromisos que asumía, y aseguró que trazó metas que también nos señalan el camino.
El pueblo cubano, apuntó, identificó rápidamente las cualidades de Chávez, su carisma, simpatía y su don con el pueblo, y cuando conoció de su enfermedad indagaba por su estado, su evolución y qué se podía hacer.
Remarcó que el concepto de que “sí se puede”, aunque los retos sean inmensos, Chávez lo llevó a la práctica cotidianamente.
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