En su cuenta de Twitter, la cancillería repudió la persistente violación israelí del derecho internacional y el flagrante desafío de las normas éticas más básicas a través de su ataque a la instalación.
La diplomacia libanesa rechazó la acción de Tel Aviv al territorio sirio en un momento en que todavía recibe ayuda humanitaria internacional para paliar los efectos de los movimientos telúricos del pasado 6 de febrero.
En la nota, el Ministerio enfatizó que tal ataque revela, una vez más, la naturaleza agresiva de las políticas israelíes en la región.
También desde suelo libanés, el vicepresidente del Consejo Supremo Islámico chiita, Ali Al-Khatib, calificó de traicionera la intensidad de la agresión israelí contra el aeropuerto de Alepo, en un intento de destruir una instalación vital que contribuye al trabajo de socorro para las víctimas de los sismos.
Mediante un comunicado, llamó a las Naciones Unidas y a la comunidad internacional a exigir el fin de los crímenes de la entidad enemiga, levantar el asedio a Siria y aumentar el volumen de ayuda para brindar alivio a los afligidos por la tragedia.
Aviones de combate de las fuerzas de Tel Aviv bombardearon hoy las pistas de aterrizaje del Aeropuerto Internacional de Alepo, ubicado a unos 400 kilómetros al norte de la capital siria, lo que causó su salida de servicio tras sufrir daños materiales.
Una acción similar ocurrió el 18 de febrero último contra el barrio residencial de Kafersouseh, que provocó la muerte de cinco personas y afectaciones en la histórica ciudadela de Damasco y dos instituciones académicas y culturales.
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