Según la radioemisora Arutz Sheva, unos 450 oficiales y soldados de la División de Operaciones Especiales de Inteligencia Militar y 200 de las unidades de guerra cibernética no asistieron a sus puestos este domingo.
No nos presentaremos a partir de hoy, y estaremos felices de volver a nuestros puestos cuando la democracia sea segura, afirmó uno de los contestatarios que prefirió el anonimato.
Hace dos semanas 37 pilotos de reserva del 69 escuadrón de cazas se negaron a presentarse a un entrenamiento programado en protesta contra la reforma, aunque luego asistieron para dialogar con sus comandantes.
A principios de mes, una decena de excomandantes de la Fuerza Aérea de Israel (IAF) también anunciaron su rechazo a la propuesta gubernamental.
Los exjefes de la IAF publicaron una carta abierta al primer ministro Benjamin Netanyahu y al titular de Defensa, Yoav Gallant, para patentizar su oposición al proyecto.
La misiva fue firmada, entre otros, por los generales Dan Tolkovsky y Amikam Norkin y solo faltaron las rubricas de los cuatro antiguos comandantes del cuerpo ya fallecidos.
La reforma impulsada por la alianza derechista en el poder permitiría a la Knesset (parlamento) anular las decisiones judiciales con la mayoría mínima y seleccionar a los jueces.
El plan generó intensas críticas públicas y una feroz oposición en la nación, donde son sistemáticas las protestas masivas en medio de las advertencias de economistas, profesionales del derecho, académicos y funcionarios de seguridad.
Empresarios, estudiantes, políticos, trabajadores de diversos sectores y hasta militares en activo criticaron la normativa, defendida por la derecha y sectores conservadores.
Israel se encamina hacia una guerra civil, alertó ayer el político y exministro de Defensa Benny Gantz.
“Hoy estoy más ansioso que nunca, me preocupan los problemas internos y la creciente división entre sectores del pueblo por la legislación que defiende el Ejecutivo sin un verdadero diálogo”, escribió en Twitter el dirigente del partido derechista Unidad Nacional.
Precisamente, una encuesta divulgada por el Canal 13 reveló que el 58 por ciento de los israelíes estima posible el inicio de una guerra civil o de enfrentamientos violentos en el país debido a la polarización causada por la iniciativa, en tanto 31 por ciento de los interrogados desestimó el peligro.
rgh/rob