Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores mencionó que el presidente del país, Xi Jinping, instruyó máximos esfuerzos para salvar la vida de dos individuos heridos durante el incidente, ocurrido este domingo.
El mandatario también urgió esclarecer el hecho, reclamó llevar a los responsables ante la justicia y garantizar la seguridad de los chinos presentes en esa nación africana.
Con la orden de Xi la Cancillería activó un mecanismo de emergencia consular, elevó sendas protestas ante la embajada de República Centroafricana aquí y las autoridades de Bangui, y además exigió actuar de inmediato para hallar a los culpables.
Igualmente, la representación diplomática de China desplegó un grupo de trabajo en la zona del ataque para coordinar la consecuente respuesta.
El Ministerio recalcó los altos riesgos de seguridad que existen en varios países de África, al reiterar el llamado a la protección de compatriotas y empresas domésticas establecidas en ese continente.
Indicó que China aunque trabajará con los gobiernos de la región para velar por el bienestar de sus connacionales, cada cual debe tomar las debidas previsiones y evitar visitar lugares de mayor peligro.
Al amanecer de este domingo un grupo de individuos armados atacó la mina de oro de Chimbolo, sometió a los guardias y abrió fuego contra los trabajadores.
Durante el suceso mataron a nueve chinos e hirieron a otros dos.
Hasta el momento no está claro quienes perpetraron el asalto, pues la sospecha recayó en el grupo rebelde Coalición de Patriotas por el Cambio y éste culpó a mercenarios extranjeros vinculados al Gobierno y al grupo Wagner.
El crimen aconteció pocos días después que tres chinos fueron secuestrados en una zona cercana a la frontera con Camerún.
Además, entre 2018 y 2020 al menos cinco trabajadores del gigante asiático perdieron la vida en otros incidentes violentos contra minas de República Centroafricana operadas por Beijing.
ymr