Según la médica infectóloga Ana Helena Germoglio, coordinadora general del equipo de salud de la Presidencia, Lula se recupera bien en el Palacio de la Alvorada, residencia oficial del jefe de Estado en Brasilia.
La galena aseguró además que el fundador del Partido de los Trabajadores debe estar mañana completamente recuperado.
Tras presentar el 23 de marzo síntomas de gripe, el gobernante fue diagnosticado con bronconeumonía bacteriana y viral por influenza A.
Por recomendación de Germoglio, Lula, de 77 años, tuvo que posponer el viaje del fin de semana que haría a China con una amplia delegación.
El ministro de Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha, médico de profesión, confirmó asimismo que el mandatario continúa muy bien de salud y desde el sábado por la noche recibe medicación por vía oral.
Comentó que el exsindicalista despachará próximamente en la Alvorada para favorecer su proceso de rehabilitación.
«Al menos hasta el miércoles debe mantener todas sus agendas, aquí, en el Palacio de la Alvorada, por recomendación médica», remarcó.
Cuando se decida, Lula viajará al gigante asiático acompañado de 240 empresarios, además de gobernadores, senadores, diputados y ministros, para estrechar relaciones en diferentes ámbitos.
El Gobierno federal corroboró que la finalidad del viaje es «promover el relanzamiento de las relaciones con el que es el principal socio comercial del país desde 2009».
China importó el pasado año más de 89 mil 700 millones de dólares en productos brasileños, especialmente soja y minerales, y exportó casi 60 mil 700 millones de dólares al mercado nacional.
El volumen comercializado, 150,4 mil millones de dólares, creció 21 veces desde la primera visita de Lula al gigante asiático, en 2004.
También el viaje ocurre en la semana en que Brasil vuelve a exportar carne bovina tras un mes de suspensión. Las ventas del producto fueron interrumpidas tras el descubrimiento el 22 de febrero de un caso del llamado Mal de la vaca loca (enfermedad cerebral en bovinos adultos que puede transmitirse a los seres humanos por carne contaminada) en una hacienda en el municipio de Marabá, en el norteño estado de Pará.
Otras áreas de destaque en la pauta de la visita incluyen el turismo entre los dos países e inversiones.
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