La exhibición en la sede de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba evoca los daños ocasionados por los huracanes en su natal provincia de Pinar del Río, en el occidente de la isla caribeña, al tiempo que irradia el carácter resiliente de su población, una de las más castigadas por esos fenómenos naturales.
En la inauguración de la muestra, el escritor y presidente de Casa de las Américas, Abel Prieto, manifestó que Tormenta en el tiempo “representa de manera muy dramática, muy dura, muy áspera, aunque nunca desesperada, las embestidas de los huracanes contra la Isla-barco, contra la gente, contra sus cultivos, sus casas, su vida”.
“Al propio tiempo, con esa sabiduría que le viene de sus más remotos, antepasados” el artista nos repite en un tono cómplice que “venimos de una resistencia, caminamos dentro de una resistencia, y somos capaces de ver el Milagro porque sentimos la historia de muchos en una sola visión”, opinó.
En su quehacer, Hernández destaca por su recurrente interés en los cielos, el mar y los paisajes costeros, en una forma que logra atrapar en lienzos y cartulinas, imágenes, olores y elementos alusivos a la identidad.
Para El Negro, su obra responde «a tradiciones afrocubanas, culturales, que expresan sentimientos. Mis casas viejas tienen postes de luz que iluminan la tierra, el cielo y el espíritu. Como siempre digo ‘Ashé para ustedes y pa’l Negro”, declaró en entrevista al periódico Guerrillero.
El pintor, grabador y dibujante ha dedicado décadas al paisaje cubano, el cual se distingue por la representación de los vientos arrasadores, vendavales, bohíos, olas que rompen en la orilla y los parajes del pueblo donde nació: Puerto Esperanza, uno de los más afectados por el huracán Ian el pasado año.
A lo largo de su prolífica carrera, Hernández acumula más de medio centenar de exposiciones individuales y colectivas dentro y fuera del país, así como prestigiosos reconocimientos.
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