La primera razón es la incapacidad de Netanyahu para controlar a los ministros de extrema derecha de su gabinete en el manejo de la cuestión palestina, precisó el portal informático.
Incluso antes de la toma de posesión, el sexto gobierno de Netanyahu estaba paralizado desde el punto de vista internacional porque el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, decidió ejecutar un boicot no oficial contra los ministros ultraderechistas Itamar Ben Gvir y Bezalel Smotrich, subrayó.
Walla resaltó que aunque “la Casa Blanca no lo dijo públicamente, prohibió a cualquier miembro de la administración reunirse con ellos, y la mayoría de los países occidentales siguieron una política similar”.
Esta es una situación sin precedentes en la historia de Israel, que no solo daña su estatus internacional, sino que también impide el avance de muchos temas clave, subrayó.
Los Acuerdos de Abraham, que permitieron el establecimiento de relaciones diplomáticas de Israel con varios países árabes, se enfriaron, los líderes europeos nos reprenden en público y la normalización con Arabia Saudí no se vislumbra, señaló el portal noticioso al enumerar las crisis que enfrenta Netanyahu.
Resaltó que en muchas capitales “quedó claro que Netanyahu tiene un control limitado sobre la agenda de su gobierno”.
En la primera semana en el poder, Ben Gvir ingresó a la Explanada de las Mezquitas, lo cual provocó un aluvión de críticas internacionales, mientras el titular de Justicia, Yariv Levin, presentó una polémica reforma judicial que desató una ola de protestas en el país, apuntó.
El sitio resaltó que en el mundo están asombrados al ver cómo Netanyahu otorgó poderes en Cisjordania a Ben Gvir y a Smotrich, lo cual se traduce en una campaña sin precedente de construcción y ampliación de las colonias judías.
Si eso no es suficiente, las declaraciones de Smotrich sobre su respaldo a la destrucción del poblado palestino de Hawara “causaron una profunda conmoción entre los aliados de Israel”, afirmó.
A su vez, manifestó, esa conducta y declaraciones afectaron las relaciones del país con los árabes.
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