Durante el encuentro, Nasrallah y la delegación de Hamas discutieron los últimos acontecimientos en la causa del pueblo palestino, a la luz del ataque israelí a la Mezquita de Al Aqsa y la respuesta en Cisjordania y la Franja de Gaza.
Según la nota difundida, en la reunión las partes trataron además el escenario político en la región, la preparación del eje de resistencia y la cooperación de todos para enfrentar los desafíos ante los crímenes de Tel Aviv.
El diálogo entre Nasrallah y Haniyeh sucede en el contexto de las continuas incursiones del Ejército israelí y los colonos a la Mezquita de Al Aqsa y la represión contra sus fieles.
Desde la noche del martes, la zona vive jornadas de tensión como consecuencia de las violaciones de la policía israelí para desalojar a los palestinos presentes a esa hora en el referido recinto en medio del Ramadán, mes sagrado de los musulmanes.
En respuesta, las milicias palestinas lanzaron cohetes hacia Israel desde la Franja de Gaza y el sur de Líbano, lo cual provocó una represalia de ese país.
Ante las atrocidades de Tel Aviv, Líbano presentó ante las Naciones Unidas una carta de queja por el ataque a las aldeas del sur de la nación y exhortó al Consejo de Seguridad y a la comunidad internacional a condenar en los términos más enérgicos tales prácticas de la entidad sionista.
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