Con un jurado de probado prestigio en este tipo de certamen, compuesto por Wilma Alba Cal (Cuba), Rodrigo Sigal (México) y Francisco Colasanto (Argentina), los especialistas distinguieron esta obra sobre las demás con el argumento de ser muy armónica.
«Resultó ser la más orgánica en su interacción entre video y música», precisó el comité, que también valoró esta producción por el trabajo de la espacialidad visual y sonora.
El jurado decidió otorgar de manera especial una mención a la obra Variación sobre un tema de Penderecki, de David Marino Pedroza, de Venezuela, «por su propuesta de desarrollo innovador de los elementos sonoros y visuales», indica el acta del certamen.
Los compositores que evaluaron las obras en concurso concluyeron sobre la presencia de una alta diversidad de propuestas composicionales y técnicas mostradas con el alto nivel de desarrollo requerido por esta disciplina en la región.
A la novena edición del Premio de Composición Casa de las Américas fueron enviadas 27 obras de música visual por compositores de 11 países de América Latina y el Caribe.
Casales, ganador de esta convocatoria, estudió en la Escuela Nacional de Música de la Ciudad de México, es licenciado en Bellas Artes, y Máster en Gestión Cultural y Educación.
Mientras, el merecedor de la mención, el venezolano Marino Pedroza es compositor y docente, cuya producción pasa por la música orquestal, de cámara y solista, incluyendo, la electrónica y el video arte.
Es egresado de la maestría en Música en la Universidad «Simón Bolívar», de la ciudad de Caracas.
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