Durante la inauguración de la VI Reunión del Foro sobre Desarrollo Sostenible, el canciller alertó sobre las afectaciones a las cadenas de suministro y criticó la imposición de sanciones unilaterales y de acuerdos para restringir el acceso a programas tecnológicos estratégicos.
Además, advirtió sobre la inflación generalizada, la desaceleración económica, la insostenibilidad de la deuda externa y una agenda climática sin resolver, elementos que debilitan la posición de los países en desarrollo y afectan la colaboración internacional.
El resultado de esos procesos es una mayor desigualdad social y una profundización de la brecha entre el norte y el sur, a lo que se suma el deslindamiento de foros y mecanismos creados para preservar la paz y promover el desarrollo. Por eso, es impostergable volver a las mesas de negociaciones y coordinación, afirmó.
Al intervenir en la cita organizada por la Comisión Económica para América Latina y El Caribe, cuya presidencia pro tempore ejerce Argentina, Cafiero aseveró que únicamente las acciones colectivas consensuadas permitirán retornar a un tiempo de coexistencia pacífica, darán mayor estabilidad y ayudarán a atender las demandas de los pueblos.
Con estas mismas premisas lideramos la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños en 2022 y por eso también decidimos nuestro reingreso a la Unión de Naciones Suramericanas, un espacio estratégico que queremos revitalizar para poner al servicio de la integración, añadió.
Asimismo, indicó que esta región fue una de las más golpeadas por la pandemia de la Covid-19 y aseguró que una recuperación verdaderamente transformadora solo puede lograrse por la vía del diálogo y la cooperación sin exclusión.
Queremos un modelo de desarrollo con justicia social. No podemos ser un eslabón de materia prima que nos lleve a un sistema incapaz de incluir a los más de 650 millones de latinoamericanos y caribeños. La seguridad alimentaria debe ser una prioridad. Son necesarias políticas agrícolas, industriales y científico-técnicas, apuntó.
mem/gas