Mientras otro sector de las personas consultadas, un 36.6 por ciento, consideró que su economía mejoraría si trabaja más y para un 12.6 por ciento eso solo ocurrirá si emprende el camino de la emigración.
La UFG ofreció diferentes opciones a mil 231 personas encuestadas a las que preguntó sobre el tema y las posibilidades de que la economía progrese.
El estudio descubrió que a parte de las variables más favorecidas, un 11.6 por ciento estimó que un cambio de modelo económico lo ayudaría a una mejor situación, así como el 11 cree que la economía mejorará si estudia más, un seis si tiene un golpe de suerte y 4.4 por ciento si hay cambio en la Casa Presidencial.
El sondeo de la UFG indicó también que nueve de cada 10 preguntados cree que el encarecimiento de los alimentos es una de las cosas que más les afectó en el último año.
Las interrogantes encontraron además que el 31.1 por ciento favoreció una suspensión del impuesto al valor agregado a los productos básicos para mejorar su economía, mientras otro 33.7 por ciento dijo que una mejora sería alcanzada con un alza del salario mínimo.
Estas valoraciones ocurren cuando más del 60 por ciento de los preguntados calificó la economía del país de regular a mala en un escenario en el cual el 65 por ciento de los interrogados apreció un incremento muy alto en el costo de los productos y servicios, entre los que destacan los rubros de alimentación y salud.
La situación económica provocó que siete de cada 10 personas modifiquen su presupuesto, buscando opciones más baratas o comprando menos alimentos, y en muchos casos recortando o eliminando turnos de comidas, en una etapa en que la canasta básica subió 34 dólares el último año.
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