La víspera, la corte concluyó el juicio y consideró culpables a otros 200 sujetos y la semana pasada los primeros 100 también se convirtieron en acusados, como parte de diversas investigaciones que se tramitan en el juzgado superior, entre estas una indagación sobre la planificación y responsabilidad intelectual de las acciones.
Por su parte, en otra, se inquiere a los participantes sobre la invasión que no fueron detenidos en flagrante durante la depredación perpetrada contra los edificios del Congreso Nacional, el STF y el Palacio del Planalto, sede del Poder Ejecutivo. El juicio de los ministros, de forma virtual, ocurre hasta el 8 de mayo, y bajo esa modalidad, los magistrados votan por medio del sistema establecido en la corte, pero si hay solicitud de vista, la consulta se suspende.
De ocurrir un pedido de destaque, la decisión es llevada al plenario físico del tribunal.
En total, la Procuraduría General de la República denunció a mil 390 personas en las investigaciones sobre los hechos golpistas: 239 en el núcleo de los ejecutores, mil 150 en el de los incitadores y a una persona ante la supuesta omisión de agentes públicos.
La denuncia es la primera etapa de una acción penal pública y se presenta al término de las investigaciones.
Entre los hechos por los cuales los denunciados pueden responder aparecen asociación criminal armada, abolición violenta del Estado Democrático de Derecho, golpe de Estado, daño calificado contra el patrimonio de la Unión, además de deterioro de propiedad derribada,
Una vez aceptado el delito por la justicia, convierte a los acusados en reos y puede resultar en condena por transgresiones señaladas.
La Corte Suprema deberá analizar todos los casos, pero no hay plazo para ello.
Grupos de adeptos radicales del derrotado mandatario Jair Bolsonaro, inconformes con el resultado de las elecciones de octubre pasado, ganadas por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, se instalaron en carpas durante dos meses frente al Cuartel General del Ejército en Brasilia.
Estimulados por discursos de odio, los congregados en elcampamento acudierpn a la violencia y resultó la base de los ataques terroristas del 8 de enero a las sedes de los tres máximos poderes en el Distrito Federal.
mgt/ocs