El rotativo indicó que el país norteño repatria un promedio de 440 exprisioneros criollos cada mes, después de terminar la ejecución de su pena en cárceles de varias ciudades, entre estas Nueva York, Miami y Los Ángeles.
Del 1 de enero al 6 de mayo pasado la cantidad de ciudadanos devueltos a este territorio del Caribe ascendió a mil 760, con la llegada ese día de 125 nacionales en un avión fletado por el Servicio de Inmigración y Aduanas.
A partir del 15 de abril último las autoridades de ese país comunicaron el aumento de la frecuencia de las deportaciones de dos a ocho mensuales bajo el argumento de que las cárceles están llenas de reos de diferentes nacionalidades.
Más del 50 por ciento de los individuos que ingresan a Santo Domingo por esa vía fueron sancionados por tráfico de drogas y asesinatos, y otros por falsificación de documentos, fraudes estatales, violaciones sexuales, robos y asaltos, por porte y tenencia de armas de fuego ilegal, entre otras faltas.
De acuerdo con Hoy, muchos de ellos permanecieron en cárceles de las ciudades ya citadas, además de Boston, California, Filadelfia, San Antonio, Texas y Massachusetts, donde aún quedan miles en prisión, según fuentes de Inmigración de Estados Unidos.
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