A través de su cuenta en Twitter, el comando internacional destacó la continuidad de una etapa de limpieza de tierras para que sus propietarios puedan cultivarlas y utilizarlas nuevamente.
Hasta la fecha, las brigadas de la Unifil eliminaron bombas de racimo, minas antipersonales y otros artefactos sin detonar en suelo libanés, como consecuencia de las guerras frente a Israel.
A pesar de los resultados, los pacificadores advirtieron sobre la amenaza de las minas terrestres y otros explosivos sin estallar y reiteraron la búsqueda incesante de restos de los conflictos armados.
Desde 2006 la Unifil limpia sistemáticamente los campos de minas a lo largo de la Línea Azul para permitir el acceso y mantener los marcadores de barril azules.
Según el canal panárabe Al Mayadeen, después de la retirada de las fuerzas de Tel Aviv de las zonas del sur y la Bekaa occidental en el 2000 la presencia de cientos de miles de minas y municiones sin detonar en el suelo impidió la construcción, el desarrollo y el retorno a la vida.
Pese a la negativa de Israel a entregar mapas a asociaciones y organizaciones internacionales, Líbano hace esfuerzos intensivos para despejar minas y limpiar más del 80 por ciento de la tierra total en el período reciente.
El 19 de marzo de 1978 el Consejo de Seguridad de la ONU estableció el comando internacional para confirmar la retirada israelí del territorio libanés, así como restablecer la paz y la seguridad internacionales.
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