Mediante un comunicado, la organización indicó que el 25 de mayo de 2000 refrendó la firmeza, insistencia, confrontación y batallas de honor de los libaneses contra el enemigo israelí desde 1982.
El movimiento enfatizó en que el triunfo ante el ente de Tel Aviv representó la liberación de la voluntad nacional, la protección de la paz y la estabilidad para el pueblo.
A propósito, llamó a todos a nivel nacional a tomar conciencia y restaurar el valor de la liberación, no solo en el orden militar y de seguridad, sino más bien a nivel de construcción del país y del ciudadano, sin injerencias extranjeras.
En este contexto, el diputado Ihab Hamadeh consideró que la retirada israelí en 2000 sentó las bases para una nueva fase del conflicto contra el enemigo.
Hamadeh puntualizó que la victoria de hace 23 años cambió la imagen de la nación que solía narrar su historia en términos de retroceso y catástrofe.
En vísperas del Día de la Liberación y la Resistencia este jueves, el movimiento Hizbulah realizó ayer una maniobra militar simbólica con munición real en uno de sus campamentos en el sur del país, en la que exhibió armas, misiles y vehículos.
Medios de prensa nacionales e internacionales presenciaron el ejercicio que incluyó el uso de una serie de drones durante la implementación de misiones de combate y la captura de soldados israelíes.
También, una simulación de la destrucción del muro de separación en la frontera entre Líbano y Palestina y su penetración hacia los territorios ocupados.
En la ocasión, el jefe del Consejo Ejecutivo de Hizbulah, Hashim Safieddine, subrayó que las armas permanecerán en manos de los combatientes de la resistencia hasta lograr la victoria completa y recuperar las granjas de Shebaa, las colinas de Kfar Shuba y la parte libanesa de la ciudad de Ghajar. Las fuerzas israelíes invadieron la nación de los cedros en 1982 y su presencia quedó reducida con el tiempo a la región sur hasta el triunfo de los combatientes de la resistencia libanesa el 25 de mayo de 2000.
jf/yma