Rodríguez Hernández explicó la historia y evolución de la guerra económica de los Estados Unidos contra la nación caribeña, en distintos periodos de la existencia de la Revolución Cubana.
Además, se refirió a los severos impactos del cerco, cuyas pérdidas por daños económicos, financieros y comerciales superan los 150 mil 410 millones de dólares y, atendiendo a la depreciación del dólar frente al oro, la cifra llega, puntualizó, al billón de dólares.
También destacó la reincorporación de Cuba en la denominada lista de los supuestos países patrocinadores del terrorismo, por la administración de Donald Trump, lo que ha creado más dificultades para los inversionistas extranjeros en Europa y en otros continentes.
La referida lista, además, es ilegal, arbitraria, espuria y contraria al Derecho Internacional, denunció el funcionario.
Asimismo, respondió numerosas preguntas sobre transformaciones económicas en Cuba, comercio, nuevas formas de propiedad e inversiones extranjeras, la vida de los cubanos, su realidad actual y las relaciones de Cuba con Rusia, China, Vietnam y la geopolítica global.
El embajador agradeció la solidaridad de los organizadores de la campaña “No! Sanction” (https://no-sanctions.net/),en cuyo texto de la plataforma se menciona a su país.
La plataforma también incluye a otras naciones que sufren sanciones unilaterales de Estados Unidos y son presentadas como internacionales, aunque sean unilaterales.
El diplomático recordó, además, que el día 3 de abril de este año, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas adoptó una resolución de condena “al impacto nocivo de las medidas coercitivas unilaterales sobre los derechos humanos”.
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