«Siempre he defendido la idea de que cada país es soberano para decidir modelo político, cosas internas. La misma exigencia que el mundo hace para Venezuela, no lo hace para Arabia Saudita. Es muy extraño», alegó Lula ante críticas por su apoyo al mandatario venezolano, Nicolás Maduro, elegido constitucionalmente en su país.
Manifestó querer que «Venezuela sea respetada. Quiero eso para Brasil y el mundo entero», remarcó.
Ante la insistencia por ese tema, respondió que «Maduro es parte de este continente nuestro. Hubo mucho respeto con la participación de Maduro. Nadie está obligado a estar de acuerdo con nadie. Así es como lo hacemos», recalcó.
Interrogado sobre la discordancia y cuestionamientos de otros jefes de Estado, el fundador del Partido de los Trabajadores precisó que los líderes reunidos en Brasilia no necesitan necesariamente formar el «grupo de los amigos».
«El hecho de tener dos presidentes que no estuvieron de acuerdo, no sé en qué periódico leyeron. Dije que aquí no fue convocada una reunión de amigos de Lula. Se convocó una reunión de presidentes para construir un órgano de los países», subrayó.
Al inaugurar la cumbre en horas matutinas de este martes, Lula llamó a superar las diferencias ideológicas que afectan la voluntad de la integración.
«En la región, dejamos que las ideologías nos dividieran e interrumpieran el esfuerzo de integración. Abandonamos canales de diálogos y mecanismos de cooperación y, con eso, todos perdemos», declaró ante mandatarios y representantes reunidos a puerta cerrada en el Palacio de Itamaraty, capitalina sede de la cancillería.
Aseguró estar convencido de que necesitamos reavivar el compromiso con la integración sudamericana.
Reforzó en que los elementos que nos unen están por encima de divergencias de orden ideológico.
Anteriormente, tras reunirse con Maduro, denunció que «el prejuicio contra Venezuela es muy grande. Cuántas críticas hemos sufrido aquí durante la campaña por ser amigo de Venezuela».
Recomendó, además, que Caracas necesita divulgar su narrativa sobre la situación política y económica del país para hacer frente a las construidas por opositores en el escenario internacional.
Asistieron a la reunión, los presidentes de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Uruguay, Surinam y Venezuela. Perú estuvo representado por el jefe de gabinete, Alberto Otárola.
npg/ocs